Capitulo 25
La ceremonia de inicio habla concluido y, tras despedir a la familia de María en la entrada de la escuela, Rosa se dirigió de regreso al instituna.
Al Degar a la puema, levantó la vista y se encontró con unos ojos conocidos.
For alguna razón, después de haber dejado todo atrás, cada vez que veia a Hugo, emergia una sensación de colpa, como si hubiera cometido in ense y sus pañes la
hubieran descubierto.
Era igual a cuando de miña habila regalado el collar de su madre a un compañero de clase y la habían descubie
¿Sería es la autoridad de un adulto?
Al encontrarse de frente, no podia fingir que no lo vela y, a regañadientes, se acercó para saludar.
-Tio, ¿qué haces aquí?
Observando su mirada evasiva, um dolor sutil volvía a aflorar en el corazón de Hugn
Sin embargo, reprimia la marea de emociones que amenazaba com desbordarse y pretendía estar tranquilo.
-Vine a ver la ceremonia de inicio.
Rosa asintió en silencio, sin añadir más.
Ambos avanzaban en silencio hacia el interior del instituto.
Este silencio hacia que Hugo se sintiera incómodo y buscara algo de qué hablar.
-¿Por qué estudias escultura? ¿No te gustaba pintar? ¿Por qué no seguir profundizando? (4)
La expresión de Rosa se endureció y forzó una sonrisa.
-Me incluyeron en una lista negra del sector, decidi cambiar de rumbo.
Hugo recordó entonces aquel incidente de plagio.
La culpa le inundaba como una marea, y sentía un peso en el pecho que no le permitía respirar
Tras unos minutos de silencio, finalmente se ammó de valor para decir esa palabra – Lo sierro.
Lamentablemente, esa disculpa llegó demasiado tarde, quando Rosa ya no la necesitaba.
A pesar de los años de crianza y afecto, ella no podía culparlo y solo pudo sonreír amargamente y negar con la cabeza
-No importa, ya pasó, la escultura también está bien.
¿Realmente todo había pasado?
Hugo sabía que, aunque aclarara la situación ahora, aquello nunca terminaría.
La difamación lanzada contra Rosa podría limpiarse, pero el daño causado sería como las grietas en un espejo roto, imposibles de eliminar por completo.
Toda la alegría que sentía al verla se veía ahora reemplazada por la culpa y el remordimiento.
Incluso el largo pasillo que tenía delante parecía convertirse en un lugar de tortura para él.
Ya no tenía derecho a disfrutar ni siquiera de ese breve momento de felicidad y buscó rápidamente una excusa para marcharse.
Rosa lo deturvo.
Con el corazón hecho un lío, se giró y vio sus ojos claros y sinceros.
Ella, con las manos detrás de la espalda, hablaba con tono sincero y genuino.
-Tio, el día que dormiste en mi habitación, realmente no te ayudé a entrar, te equivocaste de camino porque estabas borracho.
Hugo no esperaba que ella recordara ese incidente.
Tampoco esperaba que lo mencionara y lo explicara con tanta seriedad.
Nadie sabía mejor que él la verdad.
Quería decirlo todo sin importar las consecuencias, pero la razón le decía que no podía.
Había prometido a María guardar el secreto, llevaba el futuro de la familia Torres sobre sus hombros y no podía poner a Rosa en peligro.
Ella era joven y tenía un futuro prometedor; no podía destruir su vida de manera egoista, haciendo que después de perder a su familia, volvera a caer en el vóctice de la opinión pública (2)
Todas estas eran razones que lo ataban
Así que cerró los ojos llenos de lágrimas y esbozó una sonrisa indefinida.
-Ahora recuerdo, ese día bebi demasiado, no fue tu culpa, lo siento, Rosa
Aloir su respuesta, Rosa se liberó del último peso en su corazón
Su rostro se iluminó con una sonrisa radiante y levantó la mano para despedirse.
-Que tengas un buen viaje, hasta luego, tio.
Hugo asintió ligeramente, sin responderie, observando cómo se alejaba saltando hacía su futuro.
Capitulo 25
Cuando su silueta desapareció en la esquina, las lágrimas cayeron inesperadamente, aterrizando en las hojas verdes tiemas, temblando como gotas de rocío.
Elena lo llamó desde atrás.
Cuando Hugo se giró de nuevo, se puso la máscara del heredero de la familia Torres.
Antes de subir al coche, dio una instrucción a Elena.
-Publica las pruebas del plagio de Ana. 6